domingo, 8 de diciembre de 2013

Unidad IV "El Razonamiento" Tema: 4.1 Naturaleza y caracteristicas del razonamiento. a) Elementos: materia o contenido y forma. b) Premisas y conclusion.

Apertura

Atiende el siguiente video "Vivir mi vida" de Marc Anthony en: http://www.youtube.com/watch?v=YXnjy5YlDwk

Identifica la idea principal, es decir, los dos juicios mas importantes que, al relacionarse entre si, permitan la inferencia de una conlusion:

Premisa 1: Si ansias la vida hay que vivirla
Premisa 2: Voy a reir, voy a gozar
Conclusion: Voy a vivr mi vida por que solo hay una.
Actividad de Aprendizaje.

Fragmentos del textos Logica ¿ para que ?

Un argumento se compone de un conjunto de proposiciones, de las cuales unas se denominan premisas y otra recibe el nombre de conclusiones. Las premisas son razones que ofrece como fundamento o apoyo para la aceptacion de la conclusion, con el objetivo de que esta ultima sea aceptable racionalmente por otras personas. La conclusion, por su parte, es la proposicion que se defiende sobre la base de las premisas.

Es importante señalar que para que exista un argumento debe de existir al menos una premisa y una conclusion, pero debe quedar claro que puede haber más de una premisa.

Podemos representar un argumento con el siguiente esquema.

Premisa 1. Todos los filósofos son persona reflexivas
Premisa 2. Aristóteles fue un filosofo.
Conclusión. Por lo tanto, Aristoteles fue una persona reflexiva.

Materia del argumento. Un argumento se compone de conceptos y proposiciones. De dichas proposiciones, unas se denominan premisas y otra conclusión




Estructura del argumento. Se refiere a la forma en que están relacionados los elementos del argumento. La forma del argumento se obtiene suprimiendo el contenido y dejando únicamente los términos lógicos (conectivas lógicas, cuantificadores, etc.)  y los símbolos de proposiciones. Por ejemplo:

1. Si juego en clase, entonces el profesor me regaña.
2. Juego en clase.
    Por lo tanto, el profesor me regaña.

La lógica a establecido cinco conectivas lógicas:
"No"
"Y"
"O"
"Si ...entonces"
"Si y solo si"

Para obtener la estructura del argumento, sera necesario seguir los siguientes pasos:

a) Ubicar las conectivas lógicas. En este caso tengo "Si ... entonces".
b) Determinar cuantas proposiciones diferentes tengo. En este caso cuento con dos. Es importante hacerlas explicitas, es decir, determinar mi sujeto, mi predicado y el verbo o copula. Generalmente en el lenguaje cotidiano omitimos nuestro sujeto de la oración para evitar ser repetitivos, pero para clarificar la estructura es importante tenerlo claro.

Observamos que en el ejemplo tengo dos oraciones diferentes:

1. [Yo] juego en clase.
2. El profesor me regaña.
e) Sustituyo cada oración distinta por un letra diferente: generalmente suelen utilizarse de la letra "p" (minúscula) en adelante.
Esto es algo convencional, es decir, en realidad podría utilizar cualquier tipo de símbolo siempre y cuando sea el mismo para la misma oración. Para facilitar la revisión de los ejercicios, nosotros emplearemos los símbolos convencionales de letras minúsculas. Así tenemos:

p= [Yo] juego en clase.
q= El profesor me regaña.
d) Una vez que determinamos nuestras conectivas lógicas y nuestros símbolos para proposiciones, estamos preparados para obtener la estructura o forma del argumento.

1. Si p entonces q
2. P
q

Contenido: Esta formado por los significados de los enunciados que intervienen en el argumento.

Algunos autores señalan que el contenido se refiere al tema del que se habla. Es importante destacar que para la lógica formal, el contenido de un argumento es irrelevante, pues sólo le interesa la estructura de los argumentos deductivos.

Identificación de argumentos.
Saber identificar argumentos supone que sabemos reconocer sus elementos. Sin embargo, dichos elementos muchas veces no se encuentran tan claramente expresados, por ello, a continuación te ofrecemos algunos consejos que te facilitarán la tarea.

Al tratar de identificar las premisas y la conclusión de un argumento es importante que sepas que la posición que ocupan las proposiciones dentro de un argumento no nos indica si se trata de premisas o conclusiones, ya que por razones de estilo de quien escribe, la conclusión puede aparecer al principio, e medio o al final del argumento. Lo mismo ocurre con las premisas. Sin embargo, para localizar argumentos en un texto de la vida cotidiana, podemos auxiliarnos de ciertas palabras que indican su presencia. Dichas palabras facilitan la identificación de las premisas y la conclusión.

La aparición de las siguientes palabras al principio de una proposición nos indica (generalmente) que lo que sigue es una conclusión:

* Por lo tanto
* Por ende
* Así
* Se desprende que
* Como resultado
* Llegamos a la conclusión
* Luego
* Se sigue que
* Podemos inferir
* Podemos concluir
* Otros términos sinónimos

La presencia de las siguientes palabras al comienzo de una proposición significa (generalmente) que dicha proposición constituye una premisa:

* Puesto que
* Porque
* Pues
* Ya que
* En tanto que
* Dado que
* Por la razón de que
* Otros términos sinónimos

Es importante aclarar que muchas veces estas palabras, aunque aparecen en el texto, no tienen la función de indicadores de premisas y de conclusión, de tal forma que en estos casos no nos estarían indicando la presencia ni de premisas ni de conclusión, y por ello debemos usar estas guías en conjunción con el contexto en que se da el texto que analizamos.

Otras veces estas palabras no aparecen en el texto para indicarnos la presencia de premisas y conclusión,  pero aunque no aparezcan, podemos saber que allí hay un argumento. En estos casos uno se puede preguntar:

a) ¿Qué proposición quiere defender el autor? (esto nos indica la presencia de una conclusión).
b) ¿Qué razones da el autor para defender dicha proposición? (esto nos indica la presencia de premisas)


Actividades de cierre de la unidad

Lee cuidadosamente el texto que aparece a continuación. En él hay argumentos en los que tiene que identificar las premisas y la conclusión. Para ello realiza las siguientes actividades:

a) Encierra en un cuadrado los indicadores de premisas (si los hay).

b) Encierra en un círculo los indicadores de conclusión (si los hay).

c) En caso de que no hubiera indicadores, ya sea de premisas o de conclusión, aplica las preguntas que hemos expuesto anteriormente para determinar los elementos del argumento.

d) Encierra entre corchetes cada una de las premisas.

e) Encierra entre llaves la conclusión o conclusiones (en el caso de que hubiera más de un argumento).

Advertencia. Es importante que tengas presente que los indicadores nos señalan la presencia de premisas o de conclusión, pero no forman parte de ninguna de ellas, por lo cual nos deben enrr dentro de los corchetes ni de las llaves.


Texto:
Séneca, “Libro primero: De la Divina Providencia, Capítulo I”, en Tratados morales:

Cómo habiendo esta Providencia, suceden males a los hombres buenos Pregúntasme, Lucilo, cómo se compadece que gobernándose el mundo con  divina Providencia, sucedan muchos males a los hombres buenos. Daréte  razón de esto con más comodidad en el contexto del libro, cuando probare  que a todas las cosas preside la Providencia divina, y que nos asiste  Dios. Pero porque has mostrado gusto de que se separe del todo esta parte,  y que quedando entero el negocio se decida este artículo, lo haré, por no  ser cosa difícil al que hace la causa de los dioses. Será cosa superflua  querer hacer ahora demostración de que esta grande obra del mundo no puede  estar sin alguna guarda, y que el curso y discurso cierto de las estrellas  no es de movimiento casual; por lo que mueve el caso a cada paso se turba,  y con facilidad choca; y al contrario, esta nunca ofendida velocidad  camina obligada por imperio de eterna ley, y la que trae tanta variedad de  cosas en la mar y en la tierra, y tantas clarísimas lumbreras, que con  determinada disposición alumbran, no pueden moverse por orden de materia  errante, porque las cosas que casualmente se unen no están dispuestas con  tan grande arte como lo está el gravísimo peso de la Tierra, que siendo  inmóvil mira la fuga del cielo, que en su redondez se apresura, y los  mares, que metidos en hondos valles ablandan las tierras, sin que la  entrada de los ríos les cause aumento; y ve que de pequeñas semillas nacen  grandes plantas, y que ni aun aquellas cosas que parecen confusas e  inciertas, como son las lluvias, las nubes, los golpes de encontrados  rayos, y los incendios de las rompidas cumbres de los montes, los  temblores de la movida tierra con los demás que la tumultuosa parte de las  cosas gira en contorno de ella, aunque son repentinas, no se mueven sin  razón, pues aun aquéllas tienen sus causas no menos que en las que remotas  tierras miramos como milagros; cuales son las aguas calientes en medio de  los ríos, los nuevos espacios de islas que en alto mar se descubren; y que  el que hiciere observación, retirándose en él las aguas, dejan desnudas  las riberas, y que dentro de poco tiempo vuelven a estar cubiertas,  conocerá que con una cierta volubilidad se retiran y encogen dentro de sí,  y que las olas vuelven otra vez a salir, buscando con veloz curso su  asiento, creciendo a veces con las porciones, y bajando y subiendo en un  mismo día y en una misma hora, mostrándose ya mayores y ya menores  conforme las atrae la Luna, a cuyo albedrío crece el Océano. Todo esto se  reserva para su tiempo; porque aunque tú te quejas de la divina  Providencia, no dudas de ella: yo quiero ponerte en amistad con los  dioses, que son buenos con los buenos; porque la naturaleza no consiente  que los bienes dañen a los buenos. Entre Dios y los varones justos hay una  cierta amistad unida, mediante la virtud: y cuando dice amistad, debiera  decir una estrecha familiaridad, y aun una cierta semejanza; porque el  hombre bueno se diferencia de Dios en el tiempo, siendo discípulo e  imitador suyo; porque aquel magnífico padre, que no es blando exactor de  virtudes, cría con más aspereza a los buenos, como lo hacen los severos  padres. Por lo cual cuando vieres que los varones justos y amados de Dios  padecen trabajos y fatigas, y que caminan cuesta arriba y que al contrario  los malos están lozanos y abundantes de deleite, persuádete a que al modo  que nos agrada la modestia de los hijos, y nos deleita la licencia de los  esclavos nacidos en casa, y a los primeros enfrenamos con melancólico  recogimiento, y en los otros alentamos la desenvoltura; así hace lo mismo  Dios, no teniendo en deleites al varón bueno, de quien hace experiencias  para que se haga duro, porque le prepara para sí.

Anota en este espacio el argumento central del texto:

Premisa 1:Porque aunque tu te quejas de la divina Providencia, no dudas de ella

Premisa 2:El hombre bueno se diferencia de Dios en el tiempo.

Conclusión: Por lo cual cuando vienes que los varones justos y amados de dios padecen trabajas y fatigas, caminan cuesta arriba

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